Y es tu cuerpo como ensenada
de volcánicas armonías,
oasis donde anclar cada jornada
para gozar distintas travesías.
HABLARTE AL OÍDO
Me gusta hablarte sensual al oído
para que el deseo se instale
en tus niñas y ese brillo
dispare juegos y ronroneos.
Me excita ser un niño malo
y darte pocas oportunidades
para que desarmes mi voz.
Me gusta hablarte despacio al oído
y ser la impúdica fantasía
que invade tus intimidades
con nocturnidad y alevosía.
Me excita decirte palabras
que encienden tu cuerpo
y apagan toda resistencia.
Me gusta hablarte al oído
poco a poco, cálidamente,
para al fin conseguir
que mane la excitación
de mi boca deslenguada
y que ardorosa ascienda
por tu lengua desbocada.
INCONDICIONAL
1
Sí te aproximas
y me envuelven tus brazos
sonríe el mundo.
Somos nudistas
que visten de ternura
su intimidad.
2
Sí me acaricias
y me hundo en tus labios
huye el tiempo.
Somos amantes
que apagan su fuego
con besos húmedos.